jueves, 18 abril, 2024

“Bellacovirus”, las fiestas clandestinas con que los jóvenes desafían a la pandemia

Convocan a través de las redes a encontrarse y bailar reggaeton pese a la delicada situación en el país. Iztapalapa, en la Ciudad de México, eje del problema.

Pese a que México atraviesa una delicada situación con los contagios y muertes a causa del coronavirus, muchos jóvenes decidieron ignorar las sugerencias de quedarse en casa por parte de autoridades sanitarias.

De esta manera, la rebeldía adolescente se transfiere a las redes sociales, desde donde convocan a fiestas clandestinas que llegan a reunir a más de 100 personas

Bajo el nombre de “Bellacovirus”, estos encuentros para bailar tuvieron lugar en Iztapalapa, alcaldía de la Ciudad de México. Y según reflejan los medios locales, ya se dieron en varias oportunidades.

Hubo eventos durante mayo y junio, meses más que críticos para México y el resto de América Latina que siente con más potencia los coletazos de la pandemia. Y en especial en la capital del país, donde se respeta poco la cuarentena y llamaron a no hacer fiestas o reuniones.

A pesar de que en México ya se registran más de 14 mil muertes a causa del Covid-19, los jóvenes desafían las posibles consecuencias y organizan estas fiestas prohibidas.

A través de Facebook invitaban a bailae en Iztapalapa, Ciudad de México (Captura).
A través de Facebook invitaban a bailae en Iztapalapa, Ciudad de México (Captura).

De acuerdo a lo publicado en la convocatoria del primer evento del 9 de mayo en una página de Facebook, fueron presuntamente dos chicas las que organizaron: Ammy N y Dan N. Aunque aseguran que no lograron gran repercusión, alcanzó para juntar una cifra aceptable participantes. .

El segundo evento en Iztapalapa, una de las alcaldías más golpeadas por el coronavirus, se realizó el último fin de semana. Y fue muy criticado terminó estallando en las redes debido a la situación todavía delicada en la CDMX., refleja el portal Noticias de la Laguna.

Como suele suceder en estos casos, las opiniones eran divididas. De un lado los jóvenes, necesitados de diversión y desafiantes.

Por el otro, personas de unos años más que mostraban su indignación antes estas fiestas denominadas Bellacovirus.

(Fuente: Clarín)

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