Fue el viernes 7 de abril a las 11.16 que Kevin Guerra (21) tuiteó: “Che, qué onda los que no cobramos el bono de 10 mil pesos, sigue en pie lo del saqueo, no?”.
Y en la división de ciberpatrullaje de la Gendarmería saltaron las alertas ante la palabra “saqueo”: ahora lo acusan de intimidación pública.
Hasta este martes, el tuit tenía 25 respuestas, 52 retuits y 185 “Me gusta” de un usuario con alrededor de 800 seguidores.
Pero este martes la palabra “saqueo” era tendencia en Twitter de Argentina ya que muchos, al conocerse el caso de Balcarce, decidieron tuitear lo mismo que posteó el joven que ahora es acusado por la Justicia. También hubo quienes criticaron la medida y quienes la avalaron. Para las 19, había más de 11 mil tuits sobre el tema.
Según pudo reconstruir un medio Nacional,en base a fuentes del caso, todo comenzó cuando en la Subdirección de Delitos Tecnológicos de Gendarmería recibieron el alerta de la palabra “saqueo”.
“Enseguida, desde Campo de Mayo salió el reporte de la Gendarmería rumbo al departamento judicial de donde se había originado ese tuit: Balcarce“, describieron.
El reporte, como los que se hacen cuando se dan casos de grooming o de pornografía infantil, por ejemplo, llegó a la fiscal Laura Molina de la fiscalía descentralizada.
Ahí enseguida recordaron el nombre que figuraba como autor del tuit: “Tenía una condena previa por robo”, explicaron desde la UFI de Molina.
Fue entonces que, en el marco de la pandemia por coronavirus, se instruyó a la Policía local para que chequeara el domicilio de Guerra, comprobara que cumpliera la cuarentena y se le notificara de la apertura de una causa por intimidación pública, que prevé una pena de dos a seis años de cárcel.
Guerra habló con “Somos Noticia”, de Somos Balcarce, y se limitó a decir que fue un chiste y que recibió muchas críticas por las redes sociales.
La indagatoria judicial quedará para cuando se levante la feria por el aislamiento preventivo y obligatorio ante el coronavirus.
Lo cierto es que el caso se da en el marco de la polémica que se generó luego de que la ministra de Seguridad de la Nación, Sabina Frederic, decidiera hacer un ciberpatrullaje durante la cuarentena.
“El ciberpatrullaje es una modalidad de la ciberseguridad, que puede ser pensado en un sentido análogo al patrullaje físico: a través del monitoreo con cruzamiento de palabras clave, nos permite identificar la posible comisión de delitos para dar intervención a la Justicia, que dispone las investigaciones”, había dicho la ministra.
(Fuente:Clarín)
