Creer o reventar. Marcos David Sotelo, de 32 años, sobrevivió dos veces a una balacera en menos de ocho meses, en el barrio A-3-2 de la ciudad de Posadas. El pasado 13 de junio, su tío, Cristián “Casimiro” fue asesinado a balazos.
Marcos, sobrino de Cristian Andrés Sotelo, el hombre asesinado en junio del año pasado, salvó su vida de milagro, luego de ser baleado desde un auto en movimiento en la misma zona donde acribillaron a su tío. El hecho ocurrió este martes por la noche, a solamente 150 metros de la Comisaría Décima.
Con vecinos como espectadores de la escena, un vehículo Volkswagen UP blanco, con al menos dos personas a bordo, recorrió la cuadra de la manzana 35,, midió a su víctima, esperó que camine solo, y ejecutó al menos 9 disparos, uno de ellos impactó sobre una pierna de Sotelo.
“Había muchos vecinos que estaban en la vereda tomando tereré porque hacía calor, eran cerca de las 22 horas. En la zona hay varios niños, estamos preocupados por que vuelva a ocurrir algo así”, manifestó una vecina del barrio quién agregó “fueron solamente pocos segundos que se escucharon los disparos”.
Según manifestaron los propios vecinos, la balacera duró menos de un minuto, los atacantes efectuaron los disparos y se dieron rápidamente a la fuga. Al mismo tiempo, agregaron que el vehículo estuvo en la zona minutos previos y había sido visto al menos dos veces por la misma cuadra de la manzana 35.
En cuanto a lo que ocurrió el martes, los vecinos manifestaron desconocer por qué el ataque y además reclamaron por más seguridad en el barrio ya que a las 22 suele haber niños jugando todavía.
De socorrista a víctima
En la mañana del pasado 13 de junio, fue el propio Marcos quién acudió a su tío luego de haber sido impactado por una de la lluvia de balas que se ejecutó aquel amanecer. “Yo estaba en ese momento, vi todo”, había mencionado Marcos el pasado 22 de agosto en diálogo con un medio provincial
Homicidio de Cristian “Casimiro” Sotelo
En la mañana del domingo 13 de junio de 2019, aproximadamente a las 6:30, se produjo un brutal tiroteo en el barrio A 3-2 de Posadas. Personas encapuchadas a bordo de una camioneta balearon a unos hombres que salían de una fiesta clandestina del mencionado barrio. Fueron efectuados más de veinte disparos y los agresores estarían vinculados al narcotráfico, según indicaron testigos. Como consecuencia del hecho, falleció un hombre y fueron heridas varias personas.
Un auto Ford Ka fue secuestrado ya que había sido abandonado sobre el Puente del arroyo Zaimán. En principio se tenía el dato de que este vehículo pertenecía a la banda involucrada en el hecho, pero en averiguaciones realizadas por un medio provincial, pertenecería a uno de los jóvenes que socorrió a las personas baleadas. El auto quedó varado en el puente del arroyo ya que el mismo se habría quedado sin nafta.
Gladys Beatriz Sotelo, hermana del fallecido Cristián Andrés Sotelo, explicó a este medio detalladamente cómo se dieron los hechos, de acuerdo a su versión. En palabras textuales comentó que los vecinos salían de una fiesta que se había realizado a tres casas de su domicilio. En un determinado momento, en horas de la mañana, al salir la gente del lugar antes mencionado, personas con capuchas en sus rostros, a bordo de varias camionetas, comienzan a disparar generando una “lluvia” de balazos.
Tanto el fallecido como las personas heridas ingresaron al domicilio de Gladys para buscar refugio al grito de “auxilio” y desesperación, pero no pudieron evitar ser víctimas de la balacera. Al concluir esos segundos en los cuales se efectuaron incontables disparos, la banda a bordo de las camionetas se fugaron del lugar del hecho y, los heridos fueron trasladados de urgencia al Hospital Ramón Madariaga. Cristián Andrés Sotelo perdió la vida en ese trayecto.
Impactantes fueron los relatos de la hermana de Sotelo. La mujer fue rozada por varios balazos al intentar socorrer a su hermano y a los demás hombres. “No era mi momento” , resaltó.
Varios fueron los testigos del hecho. Todos coincidieron en los relatos. Hombres encapuchados, a bordo de una camioneta, armados “hasta los dientes”, fueron los comentarios de los vecinos del barrio.
Lo más significativo es que, además de armas aparentemente 9 mm, habría sido utilizada también una Uzi, es decir una “ametralladora recortada” que tiene capacidad de disparar una ráfaga de balas en segundos.
(Fuente: M.O)
